Gol-balización

PorJimmy Bedoya

16 diciembre/2018 , ,

En un tango esta convertido el ambiente por estas semanas en la entrañable Buenos Aires. Durante la última semana de noviembre la capital de Argentina se convirtió en el epicentro político y económico mundial en donde se reunieron los líderes del G-20: presidentes, cancilleres, ministros y embajadores. Sus autoridades cumplieron con la seguridad de este trascendental evento. Sin embargo, la final de la Copa Libertadores de América fue imposible llevarla a cabo.

En las adyacencias del estadio en donde se jugaría la final se presentaron acciones de violencia que protagonizaron algunos hinchas. Como resultado el evento futbolístico del año se jugó finalmente en Europa.

No existe en el mundo otro deporte con la dominación global que posee el fútbol. Desde luego puede sonar un poco exagerada esta afirmación, pero los procesos de desarrollo de la globalización cultural del “deporte rey” lo han privilegiado de grandes escenarios y de una amplia exposición mediática.

La expansión del fútbol está ligada a un fenómeno político relacionado desde su misma aparición en Londres, trascendiendo por la exaltación de la modernidad e impulsada por el carácter internacional de la FIFA. El fútbol se ha convertido de una actividad deportiva a un espectáculo de afluencia masiva y con su crecimiento, en una gran actividad social que integra la política, la economía y la cultura.

La “gol-balización” es un término creado por la academia para referirse a la magnitud del fenómeno que es el fútbol y su impacto a nivel mundial

En la actualidad en el “balompie” la lúdica ha muerto como fin supremo en su práctica, trasladándose a un concepto de espectáculo que desarrolla intereses en donde predominan los aspectos capitalistas e industriales.

La “gol-balización” es un término creado por la academia para referirse a la magnitud del fenómeno que es el fútbol y su impacto a nivel mundial, en el que confluyen distintas temáticas que suelen verse desde las identidades nacionales y personales hasta la conformación de masculinidades alrededor de este deporte que se traducen en violencia.

Conflictividad que es un orden artificialmente impuesto en el imaginario social, por la condición de competitividad que se genera.

En conclusión, si bien la violencia se encuentra intrínseca en la personalidad del ser humano, sumado a la necesidad de obtener la superioridad sobre sus pares, como portento universal que sobrepasa las normas del establecimiento.

Se debe priorizar la acción social para dirimir entre la virilidad y las relaciones sociales que causan la violencia física y hasta la pérdida de la propia vida.

La violencia en el fútbol requiere un mayor análisis como un problema que se debe atender desde la sociología, para bosquejar el perfil del aficionado violento y explicar los orígenes y el desarrollo de la violencia asociada a su práctica deportiva para recobrar su fin recreativo.

Publicada en: https://www.cronicadelquindio.com/opinion/opinion/gol-balizacin

PorJimmy Bedoya

Coronel(r) con más de 30 años de experiencia en seguridad pública, liderazgo, capital humano y control interno.