La Alemania nazi liderada por Adolf Hitler el 1 de septiembre de 1939 invadió a Polonia. Ese hecho marcó el punto de partida a la II Guerra Mundial, WWII, convirtiéndose en el evento más significativo de la historia del siglo XX. Con una duración de seis años y siendo la primera guerra en comprometer los cinco continentes, reflejó una pluralidad y profundidad de repercusiones que fueron sentidas, tarde o temprano, prácticamente por toda la humanidad.

El fin de la II Guerra Mundial allanó el camino para la terminación de los imperios establecidos e inicio de la descolonización y la Guerra Fría, que enfrentaría a las dos naciones que resultaron triunfadoras: EEUU y la URSS. Infinidad de textos se ha escrito sobre esta, lo que ha sido un parte cardinal de la historia, reevaluando el pasado los historiadores han recorrido sus diferentes caminos, utilizando nueva información y adoptando múltiples perspectivas de la guerra.

Ha sido el conflicto más cruel y destructivo conocido por la humanidad. Se desconoce el número exacto de pérdida de vidas humanas, pero fácilmente supera los 50 millones de personas, a lo que tiene que sumarse 65 millones de heridos —entre ellos, 35 millones graves—, y 3 millones de desaparecidos. Como complemento, el índice poblacional sufrió un notable descenso que repercutió en el crecimiento de la sociedad.

Los pilares en los que se establecía la civilización occidental, sus esperanzas de desarrollo colectivo y la conjetura de una supremacía en sus ideales, quedaron sin fundamento

La guerra fue acompañada por la ruina económica. Europa quedó devastada a consecuencia de los combates terrestres y aéreos. Los permanentes bombardeos realizados, tanto por los ejércitos del Eje —primera fase del conflicto—, como por los Aliados —en la segunda— acrecentaron el problema. Urbes, industrias, redes ferroviarias y carreteras fueron gravemente afectadas. A su término los países europeos, habían perdido el liderazgo económico y cedieron el paso a EEUU como potencia económica mundial.

La crisis social y económica se transformó en una auténtica conmoción en el globo, generando profundas paradojas morales. Los pilares en los que se establecía la civilización occidental, sus esperanzas de desarrollo colectivo y la conjetura de una supremacía en sus ideales, quedaron sin fundamento. Con la excepción de EEUU, Occidente solo hasta la década de los 60’s no abandonaría la crisis de pesimismo en la que se encontraba inmersa.

La II Guerra Mundial es de tal trascendencia que ha obsesionado a muchos, a sus contemporáneos, a los historiadores, a los políticos, a infinidad de poblaciones y lo hará en las generaciones futuras, convirtiéndose en un desafío para su interpretación, ya que en ella se definen los escenarios y actores que dieron forma no solo a la segunda mitad del s. XX, sino también a los que en el inicio del s. XXI modelan la política internacional.

Publicada en: https://www.cronicadelquindio.com/opinion/opinion/wwii

PorJimmy Bedoya

Coronel(r) con más de 30 años de experiencia en seguridad pública, liderazgo, capital humano y control interno.